El post de hoy es el último de una serie dedicada a mostrar casos reales de implantación de técnicas de drenaje sostenible que se llevaron a cabo durante el año 2010 en el estado de Minnesota (U.S.A.).
Tras un estudio llevado a cabo por el distrito de conservación de Anoka (ACD), en el que se incluía tanto el potencial de mejora ambiental como la rentabilidad económica, se determinó que la instalación de seis jardines de lluvia en un barrio residencial era una opción óptima para la mejora de la calidad del agua en Rice Lake.
Antes de la instalación de estos sistemas de biorretención, la escorrentía de la zona residencial enmarcada dentro de la subcuenca RL-5 (ver imagen más abajo) vertía directamente en el lago Rice Lake sin tratamiento previo alguno.
En un análisis detallado de la cuenca de RL-5 se identificaron qué zonas eran las prioritarias para la colocación de los jardines de lluvia. Estos lugares se determinaron con el objeto de maximizar la efectividad de los jardines de lluvia proyectados garantizando su correcta ubicación para la recepción de la escorrentía.
Como en el caso de Crooked Lake los jardines de lluvia se instalaron en propiedades privadas. Pero fueron las autoridades locales las que se ocuparon de los gastos de instalación y mantenimiento, y un estudio independiente el que se ocupó del diseño, de manera que en el proceso se implicaba a gran parte de la comunidad.
Por tanto se identificaron 6 áreas de drenaje y en para cada una de ellas se diseñó un jardín de lluvia.
La figura mostrada a continuación destaca con un punto verde las localizaciones de los jardines de lluvia y en azul las áreas drenantes de cada jardín.
Instalación
Preparación y excavación del suelo para ajustar las laderas y permitir un encharcamiento de unos 30 cm de profundidad.
Construcción de un muro de contención, así como la enmienda del terreno con material edáfico que promueve el tratamiento y la infiltración.
Colocación e instalación de la cámara de pretratamiento y posicionamiento de las plantas.
Preparación del bordillo para permitir la entrada de la escorrentía desde la calle.
Imagen de uno de los seis jardines de lluvia en funcionamiento. Se ve la cámara de pretratamiento debidamente instalada con filtros para tratar la escorrentía entrante y para evitar que los residuos y sedimentos puedan entrar o salir del jardín de lluvia cuando éste alcanza su máxima capacidad.
Reducción de contaminantes y beneficios calculados
En la valoración de las reducciones en el volumen de agua, los sólidos totales suspendidos (TSS) y el fósforo total (PT) se empleó el modelo WinSLAMM. Y los porcentajes de reducción obtenidos para cada una de las seis áreas se muestran en esta tabla:
Áreas de drenaje | Extensión (m2) | Reducción del volumen de escorrentía % | Reducción de TSS % | Reducción de TP % |
Nº 1 | 9510 | 50 | 41 | 44 |
Nº 2 | 5422’8 | 65 | 55 | 58 |
Nº 3 | 8012’8 | 58 | 48 | 51 |
Nº 4 | 8134’2 | 60 | 50 | 53 |
Nº 5 | 3642’2 | 79 | 69 | 72 |
Nº 6 | 15095 | 49 | 41 | 44 |
En las imágenes de abajo se ven los jardines de lluvia de las áreas de drenaje números 1, 2 ,3 y 4 de izquierda a derecha y arriba a abajo.
Los beneficios de la calidad del agua en la masa de agua receptora, Rice Lake, derivados de las reducciones de volumen y de TSS y TP en los jardines de lluvia se resumen en cuatro puntos:
- Una recarga de aguas subterráneas
- Una mayor transparencia del agua
- Una menor carga de nutrientes, contaminantes y elementos tóxicos
- La reducción del riesgo de eutrofización
Monitorización y mantenimiento
El monitoreo y seguimiento de los jardines de lluvia se alargó durante un año para verificar que las tasas de infiltración eran las adecuadas, que las cámaras de pretratamiento funcionaban correctamente y que la vegetación se establecía exitosamente.