Los impactos de urbanización en el ciclo del agua pluvial

La urbanización es el desarrollo de los suelos, naturales, inutilizados o terrenos abandonados en zonas residenciales, comerciales e industriales. Este proceso puede tener un efecto perjudicial sobre el ciclo hidrológico.

Impactos de la urbanización sobre la cantidad de agua

El proceso de urbanización conlleva la reducción de la infiltración, la eliminación de la vegetación natural (que intercepta la precipitación y promueve la evapotranspiración) y la desaparición de irregularidades en el suelo donde se almacena el agua precipitada. Esto se traduce en la interrupción de equilibrio hídrico natural (hidrología superficial y recarga de acuíferos), cuyos efectos más relevantes son:

  • El aumento de los caudales punta
  • Volúmenes de escorrentía más elevados
  • El incremento de las inundaciones
  • Reducción de los caudales base

impermeabilizacion

Esquema del impacto de la urbanización en la cantidad de escorrentía. Fuente: Susdrailn

Impactos de la urbanización sobre la calidad del agua

Las actividades humanas dentro de las ciudades producen un gran volumen de residuos de muy diversa naturaleza que en muchos casos son depositados sobre la superficie de las cuencas urbanas y, posteriormente, arrastrados hacia los cauces receptores durante el proceso de precipitación-escorrentía. Esto tiene las diferentes y nefastas consecuencias sobre las masas de agua receptoras, como son el aumento de la carga de contaminantes; la variación en la temperatura de las aguas; la disminución de la diversidad de la vida acuática y la aparición de riesgos para la salud humana y de otros seres vivos ya que muchos de los contaminantes más comunes (sedimentos, nutrientes, materia orgánica, metales pesados, patógenos, pesticidas, herbicidas e hidrocarburos) tienen una alta toxicidad.

Además la  escorrentía propagada sobre las superficies impermeables aumenta su temperatura entre 2,5 y 4,1 ºC, lo que, además de los efectos directos sobre la vida acuática, puede provocar una disminución en las aguas receptoras del oxígeno disuelto y, por tanto, la muerte de algunas especies de peces más sensibles.Esto es importante para entender como la contaminación afecta a los ecosistemas para evaluar qué tipos de gestión de escorrentías ayudan a mejorar la calidad de aguas receptoras.

InletEscorrentía arrastrando una mancha de carburante hacia la red de alcantarillado y que posteriormente pasará al medio. Fuente: The Watershed Watch Campaign

Impactos de la  urbanización sobre la geomorfología de los  cauces

Los cambios que se producen con la generación de la escorrentía procedentes de zonas urbanizadas en la geomorfología son principalmente dos:

  • Erosión en la zona de vertido por el rápido incremento de los caudales punta, aumentando la distancia entre los márgenes, socavando el lecho y cambiando la sección transversal
  • Sedimentación de las partículas erosionadas aguas abajo, lo que conlleva también un cambio en la sección transversal del flujo, con los cambios correspondientes en el tipo de flujo del agua.

Como consecuencia, en muchas ocasiones, en necesario reforzar con hormigón los cauces, no sólo para proporcionar una mayor protección ante las inundaciones, sino para evitarla erosión debido al aumento de los caudales causados por el cambio de la impermeabilidad de las superficies de la cuenca.

Impactos de la  urbanización sobre los hábitats

Como ya se ha comentado, la escorrentía urbana procedente de áreas impermeables provoca variaciones en los cauces naturales receptores. Los flujos con más agua y más rápidos erosionan los cauces y desplazan a las comunidades biológicas ribereñas. La pérdida de suelo por la erosión de las orillas y la pérdida de la vegetación ahí situada reduce el hábitat de muchas especies de peces y otra vida acuática, mientras que los depósitos de sedimentos aguas abajo pueden asfixiar a los organismos bentónicos. Además, el arrastre de partículas contaminantes de diferente naturaleza y en muchos casos alta toxicidad puede provocar varios problemas que conllevan a la muerte de las especies. Los principales impactos al hábitat acuático y las zonas ribereñas son:

  • Desvalorización del paisaje
  • Disminución de la diversidad de la fauna acuática
  • Pérdida de riberas y la vegetación ribereña
  • Problemas de eutrofización
  • Introducción de especies alóctonas desplazando a las autóctonas

Cuando la zona impermeable de la cuenca drenante es inferior al 10%, los cauces todavía pueden mantener una calidad alta en lo referente al estado de sus hábitats. Conforme crece el porcentaje de la zona impermeable, se va mermando calidad del hábitat receptor.

Un nuevo enfoque a la urbanización puede crear zonas más sensibles a las aguas pluviales, respetuosas con la ecología y que contribuyan a la mejora de los aspectos visuales de nuestro entorno, esto incluiría la inserción de Sistemas de Drenaje Urbano Sostenible en los planes urbanísticos, sistemas que promueven una menor impermeabilización del suelo, lo que genera una menor cantidad de escorrentía y una retención «in situ» de los contaminantes y por tanto una mejor gestión de los mismos y un menor riesgo para la salud humana y ecosistémica.

 

 

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